Can Corretja

Can Corretja es el único negocio que queda en las Illes Balears dedicado a la elaboración de escobas. Situado junto al Puente Romano, actualmente está gestionado por la tercera generación de la familia Cerdà: Josep, el padre y maestro artesano en escobas, y Juanjo, el hijo y maestro artesano en instrumentos musicales.

Hacia 1940, el abuelo de Juanjo empezó el negocio de venta de escobas de todo tipo. Entonces había mucha necesidad de este producto y por eso trabajaban cuatro o cinco maestros artesanos. Los niños, al salir de la escuela, iban a pelar cañas, las mujeres hacían manojos de hojas de palma y los hombres montaban la escoba. Todavía conservan las herramientas antiguas con las que realizaban sus productos.

Actualmente sólo trabajan en la fabricación Josep y Juanjo, que van a buscar las cañas a la Albufera y el palmito a la montaña. Como que el negocio fue menguando con el tiempo debido a la aparición de otros materiales para la limpieza, se reinventaron. Con los trozos de caña que les sobran ahora hacen, además de escobas y cestos, reclamos para los pájaros, juguetes para los niños e instrumentos musicales, combinando las cañas y las calabazas.