Forn des Pla de na Tesa

La historia del Forn des Pla de na Tesa empieza el día 1 de julio de 1899, cuando se llamaba Forn de Can  Lluc. Era un horno muy pequeño que elaboraba pan y ensaimadas para  las casas del pueblo y su entorno. En el año 1962, Lluc ofreció el negocio a su sobrina y a su marido, Maria y Jaume, abuelos de los actuales propietarios. Durante 23 años, trabajaron mucho para dar los primeros pasos de lo que es hoy el negocio, el Forn des Pla de na Tesa.

En el año 1986, se pusieron al frente del negocio sus hijos, Miquel y Antònia Vidal, y sus respectivas parejas, Montse Bordoy y Biel Miralles. Con una visión emprendedora e innovadora, transformaron el horno en una pequeña industria artesana que distribuye por toda la isla. Ellos cuatro y los trabajadores que han formado y forman el equipo son quienes han hecho lo que es hoy en día el Forn des Pla de na Tesa y su marca «Es Forn». Desde el mes de enero de 2020, la tercera generación, Maties y Jaume Miralles, dirige el obrador y la gestión del negocio. Su objetivo es claro: apostar por un producto artesano y fresco hecho con materias primas de calidad, proximidad y respetuoso con el medio ambiente. Apuestan por la tradición, pero siempre acompañada de productos de vanguardia que hagan que este negocio centenario continúe siendo atractivo para las nuevas generaciones.

El horno cuenta actualmente con las creaciones de Maties Miralles, formado en la Escuela de Pastelería del Gremio de Barcelona. En el año 2012, se proclamó mejor joven pastelero de España. Después, se  fue a Francia para cumplir su sueño, trabajar en París. Allí estuvo a las órdenes del MOF Chocolatier Patrick Roger y, posteriormente, con la chef pastelera Claire Damon en Des Gateux et du Pain. Hace unos años decidió volver a Mallorca para integrarse en la plantilla del negocio familiar.