Gisela
Gisela abrió las puertas en 1952 de la mano de Francisca Matheu Llabrés, abuela de Inmaculada Mut, la actual propietaria. Francisca Vallés Matheu, su madre, también estuvo al frente del comercio toda su vida hasta su jubilación en 2019. Podemos decir que es la tienda más antigua de Binissalem dedicada a la venta de ropa de mujer, hombre y complementos. También pueden encontrarse artículos de mercería.
En la primera etapa de su historia la tienda estaba ubicada en la calle de la Rectoría donde residía la fundadora. Fueron unos años complicados, ya que entonces la gente estaba habituada a coser en su casa. Con el tiempo, se acostumbraron a ir a comprar y todo empezó a ir a mejor. Durante estos primeros años vendían ropa para bebé, cochecitos, cunas, etc.
Hay que comentar que, durante la posguerra y como en otros muchos comercios, podía pagarse a plazos. Fue muy popular la llamada «roda»: se trataba de un billete que equivalía al importe a gastar y lo amortizaban en cuotas semanales que facilitaba la compra al cliente y aseguraba el pago a la tienda.
En marzo de 1981 iniciaron una nueva etapa cuando Francisca Vallés abrió la tienda de Gisela de la calle de Bonaire, donde siguen a día de hoy. El solar donde está ubicada eran los antiguos pajares del casal conocido como Can Seda Negra, donde los labradores dejaban el ganado mientras ellos hacían mercado, y de los que después de las obras de reforma se conservaron los arcos que forman parte de la fachada de la tienda. Pensaron con acierto que era el lugar ideal para montar la tienda, en el centro del pueblo.
Immaculada, quien representa la tercera generación que regenta la tienda, asegura sentirse muy recompensada por el trabajo que realiza y por «la gente que todavía compra en el pequeño comercio». A nivel familiar se siente muy orgullosa de su abuela y de su madre por su espíritu de trabajo y de lucha.