Helados Garrido
Helados Garrido inició su historia en 1965, pero su trayectoria como heladeros venía de mucho antes. El negocio fue fundado por Francisco Garrido Soler, natural de Jijona, también maestro turronero, aunque aquí se dedicó únicamente al helado. Hacia 1970 el negocio pasó a manos de sus dos hijos, Francisco y José María Garrido Sánchez.
Inicialmente elaboraban los productos en un pequeño obrador en el Port d’Alcúdia, donde continúan actualmente. En aquel tiempo vendían los helados en un quiosco y también hacían venta ambulante con una carretilla.
En junio de 1975, los hermanos, junto con sus esposas, abrieron una heladería en el casco antiguo de Alcúdia, en la calle Moll. Años después, en marzo de 1983, abrieron otro establecimiento en el paseo marítimo del Port d’Alcúdia, un local más grande con una amplia terraza. Esta heladería del puerto se ha mantenido abierta durante más de cuarenta años, hasta que en 2024 ha cerrado sus puertas.
Helados Garrido ha obtenido diferentes premios a nivel nacional e internacional por la elaboración de los helados. El primer premio lo ganó en Valencia en 1981. En 1983, obtuvo un galardón en Italia por la calidad del producto. En 1989 y en 1990 ganó dos más en Jijona.
Hoy en día, Helados Garrido está regentado por la segunda generación de la familia, ayudados por colaboradores externos que coordinan el local y el obrador, donde se continúa manteniendo la misma línea de elaboración artesanal de siempre y se ofrecen más de 40 sabores. Además, para ellos es muy importante la materia prima, por eso utilizan siempre productos naturales y de calidad.
Sus productos estrella son los granizados y la horchata de chufa natural valenciana. Destacan también sus copas de helado tan elaboradas, como por ejemplo la Copa Negrita y Banana Split, entre otras, que sirven en su heladería de Alcúdia.