Dorita, de Teixits Cardona: «Este año cumpliré 84 años y estaré en la tienda hasta que el cuerpo aguante»

Teixits Cardona es un comercio casi centenario de Santa Eulària des Riu que ha sido catalogado como emblemático. Este establecimiento es parte de la historia del municipio y, su propietaria, Salvadora Ferrer, Dorita, es una apasionada de las telas que atesora vivencias sobre el esplendor de una época 

Teixits Cardona es la única tienda que vende telas en Santa Eulària des Riu, Ibiza, y lo hace desde hace 96 años de manera ininterrumpida.  Al frente de este comercio emblemático se encuentra Salvadora Ferrer Riera, a quienes todos conocen como Dorita. Este año Dorita cumplirá 84 años y espera continuar detrás del mostrador «hasta que el cuerpo aguante».

Si bien el comercio de las telas es fascinante, percibimos que el carácter carismático de Dorita tiene mucho que ver con que Teixits Cardona sea casi un establecimiento centenario. Cuando llegamos ya había dado varias entrevistas, porque justo esa semana había recibido, junto al resto de comercios emblemáticos de Ibiza, el distintivo que les acredita como tal. No se esperaba tanta atención mediática, nos confirma,  y tal vez tampoco escuchar felicitaciones de sus clientes por ser «emblemática». 

La fórmula del éxito

Dorita nos desvela su fórmula del éxito: «Es trabajar muchas y muchas horas. Aquí siempre hemos trabajado de manera familiar, a veces incluso sin sueldo». No  tarda en hablarnos de lo mucho que cuesta mantener una tienda como Teixits Cardona en los tiempos que corren: «Antes la tienda estaba llena de tejidos porque en aquel tiempo se vendía mucho de todo: sábanas, ropa interior o pantalones de trabajo para el campo, ya que no había confección industrial sino que todo el mundo cosía. Pero hoy en día es muy difícil, porque la gente va a grandes superficies y no cosen».

«¡Vender telas me encanta!»

Sin embargo, la pasión de Dorita por las telas hace que rápidamente nos hable también de los buenos tiempos y de cómo ha encajado tan bien en el negocio que había abierto inicialmente su suegro. «¡Vender telas me encanta!», comenta con rotundidad, al tiempo que cuenta cómo fueron sus inicios: «Esta tienda era de mis suegros. Nosotros somos de Ibiza de toda la vida, pero durante un tiempo estuvimos en Palma y mis suegros nos pidieron que viniéramos para ayudarles, y vinimos. Ya antes de casarme yo estaba familiarizada con el mundo de las telas. En mi casa éramos de costura de toda la vida. En mi familia había modistas, mi tío era sastre y mi madre era bordadora. Siempre he visto telas y me gusta vender telas. Siempre he visto hacer trajes buenos, porque antes se hacían hasta trajes de novia. Toda la vida he estado en este mundo y me fue fácil trabajar en este comercio. Yo conocía de calidades. Por supuesto, mi suegro sabía mucho de la calidad de las telas porque él era del oficio. Y bueno, fui aprendiendo, porque me gustaba».

Teixits Cardona es una tienda que emana historia en cada uno de los elementos que la componen y que hacen que la estancia en ella sea agradable. No obstante, ha tenido épocas de máximo esplendor. Dorita nos relata cómo era la tienda 40 y 30 años atrás: «Nosotros hemos llegado a tener de todo, sábanas, colchas, mantelerías… y se vendía tanto a metros como confeccionados. También teníamos una bisutería buenísima que era casi joyería, que venía de Menorca, o cinturones de piel de cocodrilo, de serpiente, de lagarto; corales, perlas cultivadas. De todo!»

Reconoce también que este año, y todo el tiempo que ha durado la pandemia, «ha sido muy costoso mantener el negocio, y lo sigue siendo». Dorita pone sus esperanzas en la temporada de verano «y ya veremos cómo va, porque hoy en día hay mucha incertidumbre», comenta, mientras vuelve a recordar tiempos pasados: «Antes, cuando llegaba la temporada, todo iba a lo grande».

Un vínculo emocional

El vínculo emocional es vital para mantener en pie un negocio familiar y parece ser uno de los factores por los que a sus casi 84 años Dorita continúa al frente. «De momento esta es la única tienda de telas del municipio. A veces he estado a punto de dejarlo y pienso: es que, por un trozo de tela, a lo mejor de un forro que no vale nada, la gente se tendrá que ir a Vila a comprar. Es que es esto o se van. Nuestro servicio aporta un poco de ayuda porque aquí hay muchas tiendas, pero casi todas son de cosas de confección o tiendas que venden de todo. Pero de lo que se dice tela, a parte de alguna tapicería, no hay».

La tradición familiar continúa de la mano de su hijo Fernando, tercera generación, quien de muy joven vio la oportunidad de hacer lo que había visto hacer a su madre siempre en la tienda, cuando se quedaron sin una dependienta. «Él se ofreció para echar una mano por las tardes y empecé a ver que ya sabía algunas cosas, como cortar».

Actualmente Teixits Cardona tiene una clientela muy variada en la que coinciden ibicencos y extranjeros que han elegido Santa Eulària des Riu como su residencia permanente.

Dorita ve el futuro con optimismo y no tiene una fecha para su retirada definitiva: «Tenemos que seguir. Si tengo salud, puedo seguir. Para mí esto es todo un reto».

Comercios Emblemáticos de las Illes Balears es un reconocimiento a estos comercios tradicionales que contribuyen a la singularidad de los espacios urbanos y, en definitiva, de los municipios. Este proyecto, impulsado por la Dirección General de Comercio del Govern de les Illes Balears y el Instituto de Innovación Empresarial (IDI), es una herramienta de promoción de los comercios emblemáticos, cuya identificación y visibilidad favorece al resto del tejido comercial de proximidad.